Seguidores

viernes, 30 de mayo de 2014

Una forma invisibilizada de maltrato infantil: no pagar la cuota alimentaria

Una forma invisibilizada de maltrato infantil: no pagar la cuota alimentaria

Recién en  1962, se describió por primera vez "el síndrome del niño apaleado": personas menores de 20 años que hayan experimentado daño físico, y/o psíquico, abuso sexual y/o privación de cuidados básicos por parte de sus padres o quienes con sus responsables (KEMPE Henry Y Ruth “Child abuse”).Históricamente hablando esta conceptualización es sumamente reciente y no porque no hubiera niños/as maltratados/as antes.

Recién en 1994 incorporamos a nuestra Constitución la Convención sobre los Derechos del Niño, que nos  compromete  a dar efectividad a los derechos que allí se reconocen, fundamentalmente que los/as niños/as sean considerados sujetos de derecho

 Recién en 2005 el Congreso Nacional sancionó la Ley de Protección Integral de los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes Nº 26061 y derogó la de Patronato.El estado a través de sus políticas públicas, se obligó a  intervenir para ayudar a la niñez con programas de salud, vivienda, educación y prevención de la violencia.

Recién en 2009 en la ley  26485 de proteccion integral a las mujeres  se define
el tipo de violencia   "económica y patrimonial" como la que se dirige a ocasionar un menoscabo en los recursos económicos o patrimoniales de la mujer(como por ejemplo la limitación de los recursos económicos destinados a satisfacer sus necesidades o privación, o de los  medios indispensables para vivir una vida digna, etc.)

Pero hemos llegado a 2014 y aún no podemos garantizar que las cuotas alimentarias  sean abonadas, ya que existe  un incumplimiento de aprosimadamente  un 70% ,por lo cual los niños/as se ven  sometidos a un estado económico inferior al previo

Esta forma de violencia hacia los niños/as es ejercida generalmente por un padre que se desentiende de sus hijos/as cuando se separa de la madre.Si han considerado a su ex pareja como un objeto de su ´propiedad, , aparentan no visualizar a los hijos/as como comunes, sino que los adscriben solamente a la madre, con quien ya no tienen relación, por ende, los chicos/as ya no existen para ellos.Esta conducta parece estar en relación a  los tipicos "celos" de los violentos que no toleran la relación madre/bebe, pues los excluye

Por otra parte no hay sanción efectiva, ni social ni mediática y al contrario se alimenta la  errada idea de que  las mujeres al separarse se enriquecen cuando sucede  todo  lo contrario

 En la "lucha " por reconquistar a su ex, pierden de vista a sus hijos/as y el no pago de la cuota es una especie de extorsión

Por lo tanto, este tipo de violencia económica y patrimonial no afecta solamente a las mujeres sino tambien a los niños/as y termina convirtiendose en violencia institucional porque desde la justicia no se toman las medidas que  aseguren  la salud, seguridad y/o bienestar emocional del niño/a

miércoles, 21 de mayo de 2014

DERECHOS HUMANOS. EL DERECHO ES EL DERECHO DEL OTRO

DERECHOS HUMANOS. EL DERECHO ES EL DERECHO DEL OTRO

En la historia de la lucha por los DDHH podemos reconocer una  primera generación  de derechos que incluye los  civiles  y políticos , que fueron los primeros en ser reconocidos legalmente, (derecho a la vida, la libertad ideológica y religiosa,  a la libre expresión, a la propiedad, al voto, a la huelga, a asociarse libremente para formar un partido político o un sindicato, etc.)
La segunda generación  de derechos incluye los económicos, sociales y culturales y promueven la acción del Estado para garantizar el acceso de todos a unas condiciones de vida adecuadas.(derecho a la educación, a la salud,  al trabajo,  a una vivienda digna, etc.)
La tercera generación de derechos fomenta la solidaridad entre los pueblos y las personas de todo el mundo,promoviendo relaciones pacíficas y constructivas que nos permitan afrontar los nuevos retos a los que se enfrenta la Humanidad (el derecho a la paz,  al desarrollo y a un medio ambiente limpio que todos podamos disfrutar.)
Nuestra Constitución resguarda estos derechos,sin embargo hay distintos actores sociales y políticos que intentan dar marcha atrás con estas conquistas. Como dice G. Sosa: “…el Estado es el actor principal en la tarea de igualar oportunidades  y construir convivencia en forma pacífica, en una sociedad diversa que, como tal, tiene conflictos y tensiones. … pero, obviamente, cada uno de nosotros/as puede aportar a construir solidaridad o fortalecer la violencia.”[1]
En el artículo de la Dra. V. Berlineblau [2] encontramos conceptos de Finkelhorn:“los movimientos por problemas sociales,  aún los que han sido exitosos,enfrentan resistencias, usualmente de dos  tipos: oposicionales e inerciales. La forma oposicional consiste en grupos organizados de oposición. La oposición inercial es también muy real, pero más difusa: consiste en obstáculos burocráticos y demoras, falta de fondos, la presión de otros problemas sociales que compiten y la apatía y el aburrimiento del público…un contramovimiento es una oposición que se desarrolla en  respuesta o como reacción al éxito de otro movimiento social. No existe todavía, se desarrolla después…” Continua diciendo Berlineblau “Lo que llamamos el backlash del abuso sexual es también un  contramovimiento¨…El segundo gran grupo involucrado en el backlash son los abogados y algunos
´testigos expertos´. Cuando las sospechas de ASI llegaron a la clase media, más y más abogados en años recientes se encontraron defendiendo a gente pudiente acusada de abuso de niños… ha devenido un campo de trabajo más especializado y definido. Una red de abogados experimentados ha reunido un cuerpo de literatura, argumentos estandarizados y razonamientos en los que basan la defensa, y un grupo de expertos y partidarios que pueden ser tenidos en cuenta para construir estos razonamientos. Estos razonamientos incluyen la idea de que los trabajadores del área de la protección infantil obran con celo excesivo al identificar el abuso, que los niños pueden ser manipulados para efectuar o consentir denuncias falsas, que una especie de mentalidad de caza de brujas e histeria sobre abuso sexual ciega a los profesionales, y así sucesivamente. Los abogados han reconocido con acierto que, para ganar las defensas de los casos de abuso de niños ayuda, si sus argumentos tienen mayor legitimidad entre el público, entre los jueces, y entre la comunidad profesional. Entonces han sido activos en hacer públicos estos argumentos y han provisto de soporte financiero a otros individuos activos en el backlash. Algunos profesionales disienten con la ideología que circunda del abuso sexual y algunos quizás han optado de manera oportunista por la ganancia financiera y notoriedad cobrada como´testigos expertos´.
¿Cómo relacionar estos conceptos con los hechos sucedidos recientemente?. En un comunicado  la Comisión de Derechos Humanos de la Federación de Psicólogos de la República Argentina (Fe.P.R.A.),nos dice que “linchar hasta matar es homicidio calificado…No avalamos el robo, ni la apropiación de propiedades ajenas ni la matanza de otros seres humanos…No hay justicia sin ley y esto está normatizado en nuestro país y a nivel internacional a través de tratados y convenciones a las que hemos adherido…”
Quiero agregar, desde el Dpto. de Prevención de la violencia y el abuso sexual infantil, que además los argumentos que podemos resumir como “ el que las hace las paga”, recuerdan  tristemente al “algo habrá hecho” y que además son sumamente hipócritas
Quienes trabajamos casos de violencia y abuso  no  vemos la misma preocupación de parte de “la gente” para castigar a quienes cometen esos hechos. Por supuesto, tampoco lo proponemos, pero ¿de donde nace esta horda que golpea hasta matar a otro ser humano?
Resulta llamativo que, por ejemplo,la Iglesia escondiera a tantos curas abusadores, que aun se defienda a violentos y abusadores condenados, que nadie se indigne cuando excarcelan a un abusador [3] y que se critique al juez Bustos por dejar libre a un presunto ladrón, pero no cuando sobreseyó a un hombre abusador de su hijito aun cuando había pruebas para declararlo culpable Tampoco se habla de las nietas que denunciaron a su abuelo juez retirado de San Isidro y que obtuvieron el apoyo de la mitad de la familia (muchos de ellos  también  del poder judicial). La otra mitad de la familia encubre, o aun peor, avala el abuso. ¿Y van a impartir justicia en otros casos similares?
O cuando el conductor Jorge Rial dice: “Te voy a pasar con un camión por arriba. A vos Marianela te hablo, a vos. Que sos una zorra, pero además tenés una asociación ilícita con gente cuyos nombres conozco y cuyas fotos voy a dar". 
De lo cual concluyo que la pesar de las muy buenas leyes que tenemos, golpear a mujeres y niños/as, violar, abusar sexualmente, etc. no es algo condenable para el común de “la gente”
No podemos retroceder a épocas  oscurantistas, hemos conquistado derechos y tenemos que velar para que no nos sean arrebatados, comenzando por afirmar que siempre el derecho es el derecho del otro
Les dejo un video para reflexionar


[1] Gaby Sosa .Antídotos contra el miedo y la violencia .Dir. Oficina de Derechos Humanos Municipalidad de Rosario
[2] El "Backlash" y el abuso sexual infantil..Reacción negativa y violenta contra profesionales que trabajan en el campo de la Protección de la Infancia..Virginia Berlinerblau*

[3] El cura Mercau, hace poco
























Ella, la culpable

Ella, la culpable
mayo 19
00:072014
“Es una loca por estar al lado de un tipo así”, “los dos están enfermos”, “yo en su lugar me hubiese ido hace mucho”, son algunas de las frases que se escuchan cuando el tema de la violencia de género se instaura en determinadas discusiones sociales. El tratamiento mediático de los últimos casos más relevantes que se vieron en la televisión y en medios de comunicación influencia la opinión popular sobre el accionar de una mujer y contribuye a re victimizarla. El conocimiento sobre el tema es, por lo general, nulo y el prejuicio está a flor de piel. Ella, la culpable.
Para entender cuáles son las razones que conducen a una mujer víctima de violencia machista a permanecer al lado de su victimario, Notas consultó a la licenciada Graciela González, directora del Departamento de Prevención de la Violencia de Género y el Abuso Sexual infantil, de la Asociación de Psicólogos de Buenos Aires.
Violencia machista
“Quién no fue ni mujer ni trabajador piensa que el de ayer fue un tiempo mejor”. María Elena Walsh
La licenciada explicó que un momento clave en una relación violenta es la respuesta a la primera agresión, en la que dependerá de cómo se comporte la víctima, si se defiende o no. “Ante el primer golpe, si ella se defiende es probable que después no pase nada, en cambio con el perdón es cuando empiezan los problemas”, dice González y agrega: “Los violentos no buscan mujeres masoquistas, al contrario, buscan que sean conscientes de lo que les están haciendo, quieran rebelarse y no puedan. Ellos encuentran ahí el placer”.
El problema para estas mujeres se hace cada vez más grande cuando perdonan al agresor, “se les empieza a hacer una historia donde cada vez es peor, van entrando en una telaraña donde quedan atrapadas con el tiempo y cuando se quieren ir ya corren peligro de que las maten”, explica González.
Respecto al tratamiento mediático del tema comenta que “siempre está la sospecha sobre la víctima, algo habrá hecho ella. No importa si es buena o mala, acá nadie tiene derecho a pegarle”. Sin embargo, “desde el Estado también se tiende a pensar que las mujeres son provocadoras y que es, en parte, su responsabilidad. En Argentina la Ley es muy buena, sólo falta que se cumpla. La Justicia es el único poder que nunca se renovó, es vitalicia y no hay forma de cambiarle la cabeza a esa gente”.
Una vez más, los golpes no sólo vienen del puño del agresor sino de una sociedad que tiende a ponerlas en el centro del debate a ellas. ¿Qué hacen para salir de ese lugar? ¿Cómo no se fueron antes? Como si eso resultase una tarea sencilla cuando están amenazadas de muerte. En muchos casos el resto de sus familias, también.
Al respecto, la licenciada explica que es muy complejo para las víctimas salir del foco del conflicto, “ellas se quejan de su situación, pero ellos les piden perdón. Son hombres que quisieron alguna vez o de los que están enamoradas. En la mayoría de los casos les da vergüenza salir a decirle a sus familias que se van a separar al mes de casarse porque el tipo les pegó”. Por lo general, la violencia empieza cuando nace el primer hijo porque se ponen muy celosos. Ahí las amenazan con matarlas si alguna vez se van de la casa. Muchas veces no tienen a donde ir, no se sustentan económicamente y les es imposible salir.
Resulta interesante cuestionar cómo son tratados los casos de violencia de género ya que últimamente ocupan gran espacio en los medios de comunicación. Como cualquier tema sensible, su tratamiento mediático debería estar a la altura de las circunstancias. Pero, ¿es del todo así? ¿Hasta qué punto una joven enredada en una relación violenta va a enriquecerse con un debate de panelistas en un programa de televisión? ¿Puede un periodista hablar de todos los temas con el mismo criterio?
Una vez más la sospecha está puesta sobre la víctima y no sobre el victimario a quien se lo avala desde el discurso machista. Si bien es importante que se visibilice la temática para contribuir a que no ocurra más, vale replantearse de qué forma es conveniente hacerlo.

Jimena Sabbag – @jimesabbag